Los hechos fueron considerados por los directivos del diario como agresiones directas contra esa casa editora y actos intimidatorios contra la libertad de prensa.
(CEPET/IFEX) – Sujetos armados atacaron y despojaron de sus vehículos a tres repartidores del diario «Noroeste» (uno de los cuales fue herido con arma de fuego), la madrugada del 1 de junio de 2010 en Culiacán, Sinaloa, en hechos que fueron considerados por los directivos de la empresa como agresiones directas contra esa casa editora y actos intimidatorios contra la libertad de prensa.
El primer incidente sucedió aproximadamente a las 5:30 horas sobre la calle General Ángel Flores, en el centro de Culiacán, donde cuatro individuos armados con pistolas, a bordo de una camioneta GMC Yukon, color negro, interceptaron a una distribuidora del periódico (todos los nombres se mantienen en reserva) y la despojaron de una motocicleta Honda Cargo 125, propiedad de Grupo Editorial Noroeste.
A las 5:50 se dio un hecho similar, cuando otro trabajador de «Noroeste» fue alcanzado por un vehículo con las mismas características con varios sujetos a bordo. Por temor a ser asaltado y perder su motocicleta, una Honda Cargo 150, el repartidor, aceleró con intención de resguardarse en las instalaciones de la Novena Zona Militar, pero metros antes de llegar, la camioneta se le cerró. «Uno de ellos me gritó: ‘hazte un lado’, me echó la camioneta encima y me paré. Me dijeron ‘somos ministeriales, te vamos a revisar’,» narró el trabajador.
Según su testimonio, uno de los sujetos le quitó la moto y se la llevó. Los otros, armados y equipados con radios, lo obligaron a subir en el asiento del copiloto de la camioneta y se internaron en calles de la colonia Melchor Ocampo. Finalmente, detuvieron la unidad frente a un terreno baldío en las inmediaciones de la colonia 5 de Mayo, donde lo bajaron.
Uno de los delincuentes lo encañonó, le apuntó a la cabeza y le preguntó dónde trabajaba. «Le respondí que repartía periódicos de ‘Noroeste’, y él me dijo que éste era el último trabajo que tendría. Ahí uno de ellos me dijo ‘híncate, porque te voy a matar’. La verdad yo sí los miré decididos a matarme, por eso no me hinqué. Me volvió a decir, ‘por qué no te hincas’, y comenzó a dispararme.»
El distribuidor de «Noroeste» corrió para ponerse a salvo, pero dos balas lo alcanzaron en la mano y el abdomen. No obstante, logró ponerse a salvo y pedir ayuda a un vecino, quien lo ayudó a llegar al hospital, donde fueron encontradas otras entradas de proyectil en su ropa y donde permanece internado.
No obstante, ésta no fue la última agresión. Minutos más tarde, otro repartidor fue despojado, en la colonia Miguel Hidalgo, de una motocicleta Honda Cargo 125 por parte de individuos armados que circulaban en una Yukon de iguales características.
En conversación con el CEPET, Manuel Becerra González, director general de «Noroeste», aseguró que ya se interpuso una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado por los ataques y atribuyó la agresión al ambiente que se vive en la entidad, previo al próximo proceso electoral, y a trabajos periodísticos recientemente publicados por el diario en los que se denuncia y se documenta el uso de la estructura de la Universidad Autónoma de Sinaloa para apoyar la campaña del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que hoy gobierna el estado.
De hecho, en su Editorial del 3 de junio el periódico rechaza que los hechos de este 1 de junio puedan ser considerados «simples robos, porque los delincuentes que los han cometido han preguntado expresamente a sus víctimas para qué empresa trabajan, y cuando estas han respondido que para ‘Noroeste’, las han amenazado, y baleado en el caso de un repartidor de suscripciones, advirtiéndoles que ese será su último empleo.»
Becerra González consideró que modificar la linea editorial no es una opción para el diario. Dijo que lejos de ceder a quien intenta intimidarlos, exigirán al gobierno que cumpla con su obligación de dar garantías al trabajo periodístico.