Un periodista que fue obligado a huir de Colombia por denunciar crímenes de la guerrilla, el Gobierno y las fuerzas paramilitares; una defensora de los derechos humanos que ha pasado 20 años documentando los abusos de ambos lados de la guerra civil en Sri Lanka; y dos activistas que usan la ley para denunciar los […]
Un periodista que fue obligado a huir de Colombia por denunciar crímenes de la guerrilla, el Gobierno y las fuerzas paramilitares; una defensora de los derechos humanos que ha pasado 20 años documentando los abusos de ambos lados de la guerra civil en Sri Lanka; y dos activistas que usan la ley para denunciar los abusos y pedir compensaciones para las víctimas de graves violaciones de los derechos humanos en Nepal y Zimbabwe: estos son los ganadores de este año de los premios mundiales para los defensores de los derechos, de Human Rights Watch.
En Norteamérica, Human Rights Watch rinde homenaje al periodista colombiano Hollman Morris y al defensor de los derechos Sunila Abeysekera, de Sri Lanka.
Morris, un periodista de televisión, cineasta de documentales y escritor que defiende a las víctimas de la violencia política, maneja un programa de televisión, «Contravia», que investiga los abusos contra los derechos humanos y enfrenta algunos de los temas mas difíciles y políticos de la sociedad colombiana. Practica un periodismo que, según él, está «motivado por la gente, luchando por la vida y combatiendo por la memoria». Debido a las recientes amenazas de muerte, Morris huyó del país la semana pasada y ahora se encuentra en Estados Unidos, informa el Committee to Protect Journalists (Comité por la Protección de los Periodistas, CPJ).
Abeysekera ha trabajado durante dos decenios como activistas en medio de la guerra civil de Sri Lanka, y ha denunciado graves abusos por parte de las fuerzas de seguridad gubernamentales y los opositores Tigres de Liberación de Tamil Eelam. Ha sido una importante activista por los derechos humanos de las mujeres en el país y en todo el mundo. «Las mujeres y niños son las primeras víctimas de cualquier clase de conflicto», dijo Abeysekera.
«Estamos homenajeando a Hollman y a Sunila por sus incansables esfuerzos por arrojar luz en las sombrías esquinas del conflicto», dijo Kenneth Roth, directora ejecutiva de Human Rights Watch. «Su trabajo ejemplifica los ideales del movimiento de derechos humanos: valor, un inquebrantable compromiso con la justicia y una genuina preocupación por los derechos de todas las víctimas».
Los abogados Mandira Sharma y Arnold Tsunga están siendo homenajeados en Europa.
Sharma, la primera mujer de su aldea en Nepal en convertirse en abogada, fundó el Foro de Defensa para promover los derechos de los ciudadanos nepaleses atrapados en la guerra civil de un decenio entre rebeldes maoistas y el Gobierno nepalés. Desde que se firmó un acuerdo de paz en 2006, Sharma se ha concentrado en llevar ante la justicia a aquellos que cometieron abusos en ambos lados. «Existe una cultura de la impunidad» dijo. «Si no enfrentamos esta situación, no podemos avanzar».
Tsunga, director ejecutivo de Abogados de Zimbabwe por los Derechos Humanos, volvió a Harare este año a pesar del acoso y las amenazas constantes de las fuerzas gubernamentales. Usa los tribunales para enfrentar al régimen del presidente Robert Mugabe, dar voz a los ciudadanos de Zimbabwe silenciados por la represión y los cientos de miles de personas que fueron desplazadas a la fuerza. «Algunas personas me preguntan por qué me molesto en usar el sistema jurídico cuando los dados están marcados en contra nuestra», dice. «Respondo que sigue habiendo un remedo de sistema de tribunales y algunos jueces valientes que cumplen la ley. Pero todos operan en camisa de fuerza y necesitan desesperadamente apoyo para seguir haciendo lo correcto».
«Todos nos sentimos inspirados por el trabajo de Mandira Sharma y Arnold Tsunga», dijo Roth. «Luchan cada día para hacer valer el estado de derecho porque saben que es el arma más fuerte contra las fuerzas abusivas en el gobierno o fuera de él».
Morris, quien el año pasado recibió el Premio Internacional de Libertad de Prensa de Periodistas Canadienses por la Libertad de Expresión, es uno de varios periodistas colombianos que huyeron del país la semana pasada después de amenazas de muerte vinculadas con sus informes. La misma semana en Colombia, CPJ y la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) informan que varios sicarios balearon y mataron al fotógrafo Carlos Alberto Jaramillo y su asistente Julio César García en Los Alcázares, Cali, aunque los motivos de los asesinatos aún no se conocen.
Los premios se entregarán en una serie de banquetes en Norteamérica y Europa en noviembre.
Para obtener más información sobre los homenajeados de Human Rights Watch en 2007, visite: http://hrw.org/events/2007/dinner/
(Foto: Hollman Morris)
(30 de octubre de 2007)