Selene Ríos Andraca y otra periodista fueron golpeadas por escoltas del gobernador electo, a quien buscaban entrevistar.
(CEPET/IFEX) – Selene Ríos Andraca, reportera del diario «Cambio», y otra periodista, cuyo nombre se mantiene en reserva y quien declinó ofrecer su testimonio, fueron golpeadas la tarde del 24 de noviembre de 2010 por escoltas del gobernador electo de Puebla, Rafael Moreno Valle, a quien buscaban entrevistar al término de la celebración del 65 aniversario del Partido Acción Nacional en esa entidad.
Sobre su caso, Ríos Andraca refirió en conversación con el CEPET la existencia de un primer incidente, por la mañana, en la sede de la Universidad Tecnológica, en el municipio de Izúcar de Matamoros, durante el foro «Gobierno, Seguridad y Justicia», donde -admitió- cruzó el cordón de seguridad establecido para la prensa por el equipo de Moreno Valle, en su intento de obtener una entrevista de éste.
Fue entonces que Marcelo García Almaguer, coordinador de comunicación del equipo de transición, se habría acercado a ella para decirle que no podía estar en esa zona, al tiempo que advirtió, «no me obligues a echarte el aparato encima». Según la periodista, se les informó que Moreno Valle no daría entrevistas sino hasta más tarde, por lo que ella y otros colegas de los medios desistieron de su intención, aunque al salir del lugar se percataron de que gobernador electo sí estaba haciendo declaraciones para las televisoras.
Por la tarde, al término de la celebración partidista realizada en el hotel Marriot de la capital poblana, uno de los escoltas del próximo gobernador trató de impedir que Ríos Andraca se acercara, pese a que un grupo de periodistas ya lo esperaba en la puerta de salida para hacerle preguntas.
La reportera refirió que tras un par de intentos por meter su grabadora y eludir al escolta que le impedía llegar, éste la tomó del brazo, lastimándola, propinándole dos codazos en el pecho y estómago que la dejaron sin aire, pues había orden de no dejarla pasar. Tras el incidente, reconoció haberse hecho de palabras con el miembro de seguridad y con el propio coordinador de comunicación, a quien reclamó el maltrato.
Ríos descartó conflictos con el equipo de Moreno Valle e incluso refirió que durante la campaña previa a la jornada electoral se le consideró una periodista cercana al entonces candidato. A pesar de ello, dijo haber publicado, el 18 de noviembre, una columna titulada «La transparencia, esa gran amenaza», en la cual cuestionó la aparente intención del gobernador electo de negociar con la oposición para mantener en la opacidad detalles de la deuda pública de la administración saliente, lo cual habría generado molestias en su equipo.
Arturo Rueda, director editorial de «Cambio», aclaró que su intención no es demandar ni la renuncia del coordinador de comunicación ni el despido del escolta involucrado. «Lo único que estamos diciendo es que no se están imponiendo reglas claras para el trabajo de los reporteros que cubren la fuente; que no digan que no va a haber entrevistas cuando a la televisión sí se le conceden. El problema es generar pautas generales de trabajo para los reporteros.
«En ningún lugar civilizado del mundo se puede coartar a los reporteros a preguntar; así como Moreno Valle tiene derecho a no responder, los reporteros tienen derecho a preguntar», añadió.
CEPET buscó a García Almaguer para obtener su versión de los hechos, pero no estuvo disponible para una entrevista. Otra reportera también agredida por elementos del equipo de seguridad de Moreno Valle en el hotel Marriot se reservó su derecho a dar detalles y dio por terminado el incidente.